Nosotros también tenemos nuestro enigma: ¿Qué llega antes a Yecla, las Fiestas de la Virgen o la Navidad?
Los yeclanos, aunque vivamos en el extranjero, no podíamos ser menos y por eso desde tiempos inmemoriales también tenemos nuestro huevo y nuestra gallina. Una de esas controversias que saltan en nuestras conversaciones y en las que nunca lograremos ponernos de acuerdo aunque afortunadamente sin que la sangre llegue al río (entre otras cosas porque no tenemos río, porque a lo mejor si lo tuviéramos no me atrevería yo a decir que no por si las moscas). ¿Qué fue antes el huevo o la gallina? ¿Qué llega antes a Yecla, la Navidad o las Fiestas de la Virgen? Lamento desvelar el huevario enigma pero hace ya bastante tiempo que los que saben mucho de estas cosas concluyeron que primero fue el huevo y luego la gallina. (Copio y pego con permiso de Larry Page y Sergey Brin).
“Las aves y gallinas evolucionaron a partir de especies que ponían huevos de cáscara dura. Por lo tanto, la primera gallina nació de un huevo de cáscara dura puesto por una especie ancestral”. Así es y no le demos más vueltas. Sin embargo, ni Page ni Brin, (y mira que estos dos lumbreras lo saben absolutamente todo), nunca podrán aclararnos si a Yecla llega antes la Navidad o las Fiestas de la Virgen. O sea, al contrario que en toda España y casi todo el mundo en el que prácticamente desde primeros de noviembre ya se está anunciando que la Navidad anda suelta un año más. Los medios de comunicación ya suenan a villancicos de la misma forma que en nuestras calles se escuchan las bandas de música que acompañan a las escuadras; todas las ciudaddes y pueblos como el nuestro (otro misterio sin resolver: ¿somos una ciudad pequeña o un pueblo grande?), ya lucen y relucen con iluminaciones de Papá Noel, estrellas de Belén, Nacimientos, mientras que en Yecla siguen las figuras de un tiraor y su pareja dando luz a nuestras calles. (Otro debate navideño sin aclarar: ¿Papá Noel o Reyes Magos? ¿Y por qué tanta obsesión en no iluminar nuestras calles con San José, la Virgen y el Niñico? ¿Es que acaso no figuran por nuestras calles y con la cabeza bien alta San Antón, San Blas, Semana Santa, Santa Cecilia y la Virgen del Castillo?
Creo que nos lo tenemos que hacer mirar porque es llegar la Navidad y en lugar de relajarnos para disfrutar de la última gran fiesta del año nos calentamos la cabeza con callejones sin salida o con callejones que aunque tengan salida no llegan a ninguna parte. ¿Qué llega antes a Yecla, las Fiestas de la Virgen o la Navidad? ¿Y si nos ponemos todos de acuerdo en que ambas celebraciones pueden ir de la mano porque ninguna tiene porqué solapar a la otra y de paso le hacemos un gran favor al comercio? Será por eso que uno de los momentos únicos que solo podemos vivir en Yecla llega con “la bajada de la Subida”. Subimos al ritmo de himnos y marchas de las Fiestas de la Virgen y bajamos entonando villancicos entre una multitud que está deseando llegar a su casa para ponerse en modo Navidad más felices que unas pascuas. Pascuas de Belén, por cierto.
